El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha adelantado este viernes que la semana que viene anunciará la imposición de nuevos aranceles comerciales a varios países, sin especificar cuáles, en una medida que busca equiparar las tasas que estas naciones imponen a productos estadounidenses.
El objetivo de esta medida pasa porque EE.UU. “sea tratado de manera equitativa con otros países”, según ha precisado el propio Trump ante los medios de comunicación presentes en el despacho oval de la Casa Blanca, durante su encuentro con el primer ministro nipón, Shigeru Ishiba.
“Lo anunciaré la próxima semana, sobre comercio recíproco, para que seamos tratados de manera equitativa con otros países, no queremos más ni menos. Así que lo anunciaré la próxima semana”, ha manifestado el presidente estadounidense.
La medida sobre el comercio recíproco fue una de las promesas de Trump durante la campaña de las elecciones presidenciales, cuando aseguró que impondría aranceles a las importaciones con tasas iguales a las que los socios comerciales imponen a las exportaciones estadounidenses.
Los aranceles comerciales se han vuelto una medida de presión con a que Trump está consiguiendo que otros países se amolden a sus exigencias. Tras amenazas a Colombia o México -entre otros- con aranceles del 25 por ciento, Bogotá aceptó recibir migrantes deportados y el Gobierno mexicano reforzó la seguridad fronteriza para impedir cruces ilegales a territorio estadounidense.
Cancelación de los llamados “minimis”
En la jornada de este viernes, Trump ordenó detener medidas de su Administración para derogar el tratamiento libre de impuestos de los paquetes de bajo coste procedentes de China, dando tiempo al Departamento de Comercio permita que el decreto sea viable, después de que el rápido cambio causó un caos en las aduanas, los servicios postales y entre las minoristas en línea.
La cancelación de los llamados “minimis” significa que los paquetes de comercio electrónico de bajo valor que llegan a EE.UU. procedentes de China deben usar el proceso de “entrada formal” que requiere más información y aranceles antes de entrar en el país, algo que toma mucho más tiempo.
El Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos, encargado de revisar los paquetes de comercio electrónico y recaudar los aranceles, celebró el jueves una reunión con profesionales de la logística para analizar la situación de más de un millón de paquetes que se acumulan en el aeropuerto internacional John F. Kennedy de Nueva York, según una fuente conocedora de la reunión.
Tomado de La Vanguardia