Se cumple un mes del asesinato de Basilio Guzmán, el abogado que fue acribillado en los Cerros de Gurabo una mañana cuando recogía el periódico frente a su propia casa.
El señor Osvaldo Bonilla, magistrado fiscal de Santiago no ha dado un solo detalle de qué pasó, no sabemos cómo va la investigación; la policía a través de Nelson Moquete tampoco ha dicho nada al respecto.
La ciudadanía quiere saber cómo va la investigación a un mes del crimen; la sociedad reclama saber qué pasó; la familia necesita descansar porque se sienten inseguros.
La familia hace dos semanas habló de que supuestamente hay manos de empresarios que están evitando que esa investigación avance, pero mientras esto se reafirma o se desmienten, son ellos los que viven con la incertidumbre de no saber si el asesino sigue rondando y han tenido que pagar los servicios de un guarda para proteger sus vidas.
Al principio se informó que tenían ubicados a un par de sospechosos, pero en concreto no han agarrado a nadie.
Luego de un par de semanas la fiscalía parece haberle echado tierra al caso, algo muy común en el país en los casos de sicariato.
