El expresidente de la República, Hipólito Mejía, no escatimó en críticas hacia el también expresidente y actual líder del partido Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, a quien calificó sin rodeos como un «vago». Todo ello durante la inauguración del parque Puerto Isabela II.
Mejía afirmó que Fernández «nunca ha trabajado» y recordó anécdotas de su tiempo como presidente, señalando que solía llegar tarde a todas las actividades oficiales.
«Él nunca ha trabajado, llegaba dos horas tarde a los actos, entonces, ¿de qué trabajo habla? Ese no sabe lo que es trabajo, un vago», destacó Mejía al ser consultado sobre las recientes declaraciones de Fernández, quien instó al Gobierno a dejar de enfocarse en el pasado y abordar los problemas del presente.
Sin embargo, el exmandatario Mejía no limitó sus críticas solo al ámbito laboral, sino que también cuestionó la capacidad de Fernández para ofrecer lecciones, incluso en temas relacionados con las mujeres. «Ese no puede dar clase de nada, ni de mujeres puede dar clase él, lo han botado como tres o cuatro veces», agregó Mejía, acresentando su crítica hacia el también candidato presidencial de la FP.
Las declaraciones de Hipólito Mejía surgen en medio de un ambiente político marcado por los recientes ataques del actual presidente, Luis Abinader, hacia los 16 años de gestión del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), al cual pertenece Leonel Fernández.
El actual gobernante criticó las negociaciones realizadas por el PLD durante su periodo de gobierno, destacando la renegociación del contrato de concesión de Aerodom en 1999, cuando Fernández era el gobernante del país por el PLD. Este intercambio de declaraciones resalta la tensión política actual y la intensidad de los debates sobre la gestión pasada y presente en la República Dominicana.
Este lunes, Abinader también se refirió a la Política antinarcóticos de los gobiernos del PLD, señalando que en su gestión ha incautado más drogas que en el los últimos 16 años.
Mejía además indicó que la Alianza Rescate RD sería una muestra de debilidad, indicando que si los partidos opositores decidieron unirse es porque reconocen que por sí solos, no son tan fuertes.