Estados Unidos anunció este viernes la imposición de una nueva ronda de sanciones a los medios de comunicación estatales rusos a los que acusa de liderar una campaña de recaudación de fondos para la compra de armamento para las tropas rusas en Ucrania y por tratar de influir en las próximas elecciones presidenciales moldavas.
El Departamento de Estado había impuesto la semana pasada sanciones financieras contra la cadena RT por presuntamente querer interferir en los comicios estadounidenses del próximo 5 de noviembre y hoy la señaló por llevar a cabo supuestas operaciones ocultas para desestabilizar la democracia alrededor del mundo.
En concreto, bloqueó los activos de la agencia de noticias estatal rusa Rossiya Segodnya y de su director general, Dimitry Kiselev, así como de TV Novosti, que controla la cadena RT.
«Estados Unidos respeta y defiende la libertad de expresión, incluso cuando se trata de medios que difunden propaganda gubernamental. Pero no nos quedaremos quietos mientras RT y otros actores apoyan de forma encubiertas las actividades malignas de Rusia», dijo en una rueda de prensa el secretario de Estado, Antony Blinken.
Según la inteligencia de Estados Unidos, el editor jefe adjunto de RT y director de radiodifusión internacional de la agencia Sputnik, Anton Anisimov, lidera una plataforma de recaudación de fondos en línea para suministrar apoyo material a las tropas rusas en Ucrania como francotiradores, chalecos antibalas y drones, parte de los cuales provienen de China.
La Administración de Joe Biden también cree que los medios estatales rusos se coordinan directamente con el Kremlin para influir en las elecciones de Moldavia del próximo octubre con el objetivo de fomentar protestas violentas en el país en caso de que no gane un candidato prorruso.
El Departamento de Estado sostiene que RT incorporó en la primavera de 2023 una unidad cibernética vinculada a la inteligencia rusa que se encarga de recabar información de todo el mundo para transmitirla al Kremlin e influir en diferentes acontecimientos.
Además, acusa a Rusia de utilizar medios encubiertos para difundir su propaganda en África, Europa y América Latina.
Por ejemplo, estaría intentando escalar las tensiones entre Argentina y sus vecinos para desestabilizar el Gobierno de Javier Milei, asegura la diplomacia estadounidense.
El jefe de la diplomacia estadounidense anunció además que su país lanzará, junto con el Reino Unido y Canadá, una campaña diplomática para alertar a los Gobiernos de todo el mundo sobre el funcionamiento de la «maquinaria de desinformación rusa».
Tomado de EFE