La viruela del mono o viruela símica no es nada nuevo ni significa un riesgo de contagios masivos para la población dominicana, por lo que la aparición de un primer caso sospechoso no debe ser motivo de alarma, según la reflexión del doctor Senén Caba, presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD).
La situación con esta viruela no es igual a la del virus del covid-19 por varias razones que explicó el médico.
Lo primero es que las personas vacunadas contra la viruela común tienen una inmunidad por encima del 80 %, y lo segundo es que solamente organismos muy débiles serían vulnerables al contagio. Los más jóvenes no están vacunados contra la viruela ya que el patógeno fue erradicado.
Senén Caba pone como ejemplos de pacientes susceptibles a personas con cáncer, una diabetes mal tratada y ancianos.
Asegura que la letalidad y el contagio son muy bajos. La variante africana tiene una mortalidad del 10 % y la occidental de casi el 2 %. Se necesita un contacto muy directo para transmitir el patógeno.
El primer caso en humanos se detectó en 1970 en la República Democrática del Congo, y el primer caso en Occidente ocurrió en 2003 en Estados Unidos.
El médico estima que lo principal es mantener bien informada a la población para evitar la alarma, y ve en esta rama la debilidad principal del sistema de salud. Por lo demás, Caba considera que las autoridades sanitarias tienen la capacidad de manejar la enfermedad en el país.
Salud Pública todavía no confirma si el dominicano con los síntomas sospechosos que vino desde Estados Unidos y está en el hospital Ramón de Lara efectivamente tiene la viruela del mono.