Abel Martínez, candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), manifestó que reducir la presencia de ilegales haitianos en el país es un problema que se «resuelve fácil» y solo aplicando lo que establece la Ley General de Migración y las medidas que contempla.
El candidato opositor, expuso este miércoles que para ello es necesario “desmontar la mafia” que estaría operando en la frontera para franquear el paso hacia el territorio nacional.
En tal sentido, prometió acabar con la mafia que vende visas a los haitianos para que entren al país.
«Parte de las problemáticas que varios sectores han señalado abiertamente que afectan el sistema de salud es la gran cantidad de parturientas haitianas que vienen a dar a luz en los hospitales de la República Dominicana», destacó.
A propósito Martínez detalló que de llegar a la Presidencia de la República, el próximo 16 de agosto, eliminará las «mafias» que «trafican» a los ilegales a través de la frontera que divide ambos países, incluidas esas parturientas.
Dejó en claro que hay comunidades en Pedernales que ya lo que atienden es haitianos, igual pasa en Elías Piña, Dajabón, una de cada tres mujeres que da luz en nuestros hospitales y maternidades públicas es haitiana, en estatus irregular migratorio.
«Qué estamos haciendo, se están quedando en RD, pero entonces cual es el presupuesto que se nos va en salud, atendemos a las dominicanas en forma correcta; vemos como a las dominicanas en múltiples ocasiones no le dan ni las medicinas porque el presupuesto se va en las haitianas», resaltó el exalcalde de Santiago de los Caballeros.
Entrevistado en el programa “La propuesta de los candidatos. Voto 2024”, por todos los medios del Grupo de Comunicaciones Corripio, el aspirante presidencial aludió que está a favor de continuar la construcción del muro fronterizo, pero visto como una barrera económica, jurídica y operativa.
“Vamos a proteger a la República Dominicana por aire, mar y tierra”, advirtió Martínez. Al mismo tiempo afirmó que apoyará a las comunidades fronterizas que, a su parecer, están abandonadas.
