Marta Elena Feitó dimitió tras los reproches públicos del mandatario Miguel Díaz-Canel, luego que asegurara que los indigentes eran personas “disfrazadas de mendigos” que “encontraron un modo de vida fácil”.
Los niveles de pobreza en Cuba se han incrementado en medio de la profunda crisis económica que vive el país, con escasez de alimentos, medicinas, apagones cotidianos y falta de combustible. (Archivo 28.10.2024)
Los niveles de pobreza en Cuba se han incrementado en medio de la profunda crisis económica que vive el país, con escasez de alimentos, medicinas, apagones cotidianos y falta de combustible. (Archivo 28.10.2024)Imagen: MARIANA SUAREZ
Marta Elena Feitó renunció este martes (15.07.2025) a su cargo como ministra del Trabajo en Cubaun día después de declarar ante el Parlamento que en el país no existen los mendigos sino gente “disfrazada”, lo que provocó que el presidente, Miguel Díaz-Canel, la reprobara en público.
En una nota oficial leída en el noticiero nocturno de la televisión estatal, el Gobierno cubano informó que Feitó renunció al cargo tras reconocer “errores” en su reciente intervención en una comisión de la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento).
Además, señaló que la renuncia fue aceptada por el Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC, único legal) y el Consejo de Estado debido a su “falta de objetividad y sensibilidad” al abordar temas clave para la sociedad cubana.
De acuerdo con la nota, la renuncia se aceptó “a partir de la falta de objetividad y sensibilidad con que abordó temas que centran hoy la gestión política y gubernamental, enfocada en atender fenómenos reales y nunca deseados por nuestra sociedad”.
Indignación general
Feitó estaba al frente de la cartera de Trabajo desde 2019, en el inicio del primer mandato de Díaz-Canel, y es además integrante del Comité Central del PCC.
Las palabras de la ahora exministra indignaron tanto a la disidencia como a círculos del oficialismo.
“Cuando usted le mira las manos, le mira las ropas que llevan esas personas, están disfrazadas de mendigos, no son mendigos. En Cuba no hay mendigos”, declaró Feitó.
La intervención no fue interpelada por los diputados, todos militantes del PCC o miembros de organizaciones afines a la formación o al Ejecutivo.
“Un modo de vida fácil”
Feitó también aseguró que quienes según ella simulan ser mendigos “encontraron un modo de vida fácil para ganar dinero y no trabajar con las formalidades que corresponden”.
Incluso señaló que quienes limpian parabrisas lo hacen para comprar bebidas alcohólicas e invitó a la gente a “no bajar la ventanilla” de sus coches para darles dinero.
También afirmó que no hay personas que busquen comida en los basureros: “Esas personas están recuperando materia prima y lo que son, son ilegales del trabajo por cuenta propia (autónomos) que están violando el fisco”.
La reprimenda de Díaz-Canel
La molestia en redes -la polémica no fue cubierta en la prensa oficial cubana- llegó a tal punto que, un día después, el propio Díaz-Canel expresó su “desacuerdo” en otra comisión parlamentaria, aunque sin mencionar el nombre de Feitó.
“No comparto algunos criterios emitidos en la comisión sobre este tema (…) es contraproducente emitir juicios como esos”, dijo el gobernante.
Díaz-Canel ya se había referido a la polémica horas antes en redes sociales, aunque en términos ambiguos y sin referirse a la ministra.
Pero el tono del mediodía -la televisión estatal transmitió su discurso de forma íntegra durante el noticiero de la tarde- fue a más.
Reconoce mendicidad
“Desde el Partido y desde el Gobierno trabajamos para abordar todos los problemas (…) Somos servidores públicos, diputados que representamos al pueblo, y no podemos actuar con soberbia ni prepotencia, desconectados de las realidades que vivimos”, censuró.
Díaz-Canel reconoció que “estas personas, que a veces describimos como mendigos o vinculadas a la mendicidad, son en realidad expresiones concretas de las desigualdades sociales y de los problemas” que Cuba enfrenta.
Los niveles de pobreza en Cuba se han incrementado en medio de la profunda crisis económica que vive el país, con escasez de alimentos, medicinas, apagones cotidianos y falta de combustible, en medio del reforzamiento del embargo de Washington desde que Donald Trump regresó a la Casa Blanca.
El presidente no mencionó la palabra pobreza, pero habló de personas en situaciones de “vulnerabilidad” y “deambulantes” (indigentes), términos que el gobierno suele utilizar para hablar de este tema.
Tomado de EFE